Análisis Literario — VIRGIN SOUL #13: A Farewell to Arms

Resumen: Gabriel sabe que está en desventaja ante Charioce tan pronto reconoce a Dromos, el arma que él usará contra ella y los dioses. 

Se trata de un dispositivo ancestral nacido del conocimiento prohibido que los humanos tomaron de los templos sagrados al llevarse las tablas que los dioses tenían selladas en ellos. 

Gabriel da la orden de retirada, pero sus ángeles guerreros desobedecen porque están confiados en que acabarán con lo que queda del ejército de Charioce. 

Gabriel entra en pánico cuando El también le desobedece, ya que no dejará de atacar a los humanos hasta haber recuperado a su madre.

Nina, Rita, Jeanne, Favaro y Kaisar fueron arrastrados a la superficie por Dromos, quedando entre sus pasillos. Desde el punto donde se encuentran, observan cómo los humanos han sido aniquilados casi por completo por los dioses. 

Rita se da cuenta de que Charioce está subiendo a Dromos, y corre en su dirección para saber qué hará con él exactamente. 

Una vez en la cabina de mando de su arma, Charioce inserta su mano izquierda en el panel de control, ligando a su vez, su ojo izquierdo para poder darle de su energía vital y usarla. 

Al hacerlo, la perla negra reorganiza sus pasajes para adoptar la forma de su mano, forzando a Nina y a los demás a aferrarse bien a lo que puedan mientras el arma cambia. 

Al ver cómo Dromos se prepara para atacar, El no desiste en su ataque tampoco, pese a que Gabriel le ruega que se detenga. 

Como El está a la cabeza del ataque por parte de los dioses iluminando todo, Jeanne logra reconocer su silueta entre la luz desde el lugar en el que está. 

Charioce dispara Dromos y El usa un escudo de protección, causando una gran ola expansiva que hace que Nina y Favaro salgan disparados por el aire. 

Nina da a parar a la zona de control de Dromos, y Charioce la atrapa al verla. Esto causa que pierda su casco y deje de disparar al mismo tiempo.

El ataque de Dromos logra penetrar la barrera de El, causándole daños a él y a los dioses. 

Rita contempla la caída de los dioses desde el punto al que ella fue a parar, de la misma forma que los dioses contemplan cómo su nave fue atacada. 

Habiéndose disipado la onda expensiva, Charioce se encuentra en el suelo de la cabina de Dromos con Nina inconsciente en sus brazos, y se da cuenta de que ha perdido la visión de su ojo izquierdo tras haber disparado. 

Los dioses remanentes en la superficie descubren su localización y se dirigen a matarlo, pero ahora que la luz de El no está brillando, los Soldados Ónice intervienen, siendo capaces de crear un escudo de protección alrededor de Charioce y de acabar con sus enemigos en tierra.

Sofiel rescata a El de los escombros que dejó el ataque de Dromos, y Gabriel acepta con espanto su derrota. 

Jeanne despierta de su inconsciencia y ve con desesperación cómo el ejército de Charioce está matando dioses, y les pide que no sigan quitándoles la vida. 

Rita despierta a Kaisar de su inconsciencia y éste le pregunta donde está Favaro, a lo que Rita contesta que no tiene ni idea, que solo lo vio salir por lo aires bastante lejos. 

Al ver a Jeanne ser perseguida por Soldados Ónice, Kaisar y Rita acuden en su ayuda.

Nina despierta de su desmayo y ve a Charioce/Chris frente a ella. Nota que él ha perdido la vista de su ojo izquierdo y que se ha vuelto grisáceo. 

Como la ve preocupada por él, Charioce le dice que aún puede verla con su otro ojo. 

Su respuesta hace que se ponga nerviosa, pero Nina le pregunta qué es lo que pretende al ocultar su identidad, pasearse por las calles de la ciudad e incluso bailar con ella. Charioce le vuelve a preguntar si volvería a bailar con él y Nina se emociona. 

Nina pronto se da cuenta de que Rita, Jeanne y Kaisar están siendo atacados por los Soldados Ónice e intenta ir en su ayuda, pero Charioce le dice que no hay forma de escapar. 

Tratándose de una situación complicada, Nina le pide a Charioce que la ayude. 

Charioce no entiende cómo se supone qué hará eso, pero Nina insiste y salta sobre él y le pide que la abrace.

Charioce sigue sin entender, pero ante la insistencia de Nina, no puede resistirse y accede a su petición, abrazándola tiernamente. Esto desencadena la transformación de Nina, y Charioce se asombra al confirmar su sospecha de que Nina siempre fue el Dragón Rojo.

Ya que el Dragón Rojo está en la cabina de comando de Dromos, en donde está el rey, los Soldados Ónice corren en su ayuda y atacan a Nina usando gólems y su magia ancestral.

Jeanne se da cuenta de que el Dragón Rojo es Nina cuando recuerda que ésta le contó su secreto en su primer intento de escape. 

Mientras todos pelean y, aprovechando que Nina distrae a los solados, Kaisar guía a Jeanne a un lugar seguro.

Charioce baja de Dromos lo más rápido que puede, camino al campo de batalla, pues se preocupa por Nina, en especial cuando el gólem con el que lucha la toma entre sus brazos e intenta asfixiar con todas sus fuerzas. 

Nina logra destruir al gólem y Charioce queda impresionado por su poder. 

Los Soldados Ónice se apresuran en usar su magia e intentan capturar al Dragón Rojo, pero éste destruye la barrera con su fuego.

Nina camina hasta a Charioce, a quien reconoce de forma instintiva. 

Charioce se le acerca y mira cautivado. Fascinado por el Dragón Rojo, intenta tocarlo, pero cuando se da cuenta de que tiene puesto el guante de su armadura, se lo retira y procede nuevamente a hacerlo. Para su deslumbre, en ese momento, Nina vuelve a su forma humana, como respuesta a su toque. Y al quedar flotando en el aire y caer, Charioce la sostiene. 

No teniendo la seguridad de que Nina está bien, la examina hasta que verifica que respira, lo que le causa un gran alivio.

Al ver que Charioce tiene a Nina desnuda en sus brazos, Rita le ataca y recupera a su amiga, a quien se lleva junto a Jeanne en Hipogriff. 

Charioce le dice que no los dejará escapar, pero Kaisar les da la oportunidad. Charioce le sigue el juego, y hace que Soldados Ónice se enfoquen en capturar a Kaisar y no Nina y los demás. 

Cuando Hipogriff ya está lejos del campo de batalla y Nina fuera de peligro, Charioce da la orden de volver al castillo, ya que los dioses se han retirado.

En el cielo Vanaheimr, Sofiel le reporta a Gabriel que El está inconsciente.

Gabriel se pregunta cómo es posible que Charioce haya sido capaz de construir un arma como Dromos, la que es una reliquia antigua, de tiempos mucho más remotos de aquellos en que dioses, humanos y demonios empezaran a vagar por Mistarcia, y que tiene el poder de destruir el equilibrio del mundo y llevarlo a su fin, pues su poder se equipara con la fuerza destructiva de Bahamut.

Nina despierta en la carroza de Bacchus mientras vuela junto a Jeanne y Rita en Hipogriff. 

Rita le cuenta que están con vida gracias a ella, pero Nina se lamenta porque, aunque fue de ayuda, Kaisar y Favaro no escaparon con ellas y que, hay algo más que la deja preocupada, aunque no lo menciona.

Rita irá de regreso a la ciudad a ayudar a Kaisar y a Favaro, y le pide a Nina que se quede con Jeanne y que por ningún motivo vayan a la capital, porque ahora son criminales y fugitivas. Habiéndole encargado a Jeanne la seguridad de Nina, baja de Hipogriff y usa su sombrilla para bajar suavemente por los aires hasta la superficie.

Jeanne le dice a Nina que quiere ir a la tierra de los dioses porque ahora tiene la certeza de que El está ahí, quiere verlo, pero no tiene idea de cómo llegar a su destino. 

Nina se ofrece a ayudarla, ya que la anciana de su pueblo conoce el camino hasta el lugar. Interesada en sus palabras, Jeanne le pide que la lleve con ella. 

Entonces, deciden ir al Pueblo del Dragón.

Estilo: La idea es dada desde el inicio, cuando Gabriel ordena a las tropas retirarse, pero El objeta e insiste en enfrentarse a los humanos.
La idea se reitera nuevamente a nivel emocional, cuando Charioce/Chris y Nina se encuentran, pues Charioce es incapaz de sostener su espada cuando Nina salta sobre él, rindiéndose ante ella.

Punto de vista: Predominan el de Charioce y el de Nina

Tono: Arriesgado

Recursos literarios fijos:

• Temas transversales:
• Amor
• Identidad y Secretismo
• Símbolos transversales (motifs):
• Dromos
• Mano izquierda
• Ojo izquierdo
• Color negro
• Cenizas
• Espada
• Abrazo
• Toque/Tacto

Recursos literarios mutables:

• Temas del episodio:
• Enfrentamiento y Rendición
• Temor

Conflicto: Enfrentamiento vs. Rendición

Elementos temáticos: 

• Enfrentamiento vs. Rendición:
• El y Charioce se enfrentan y, tras causarles un daño importante a los dioses, éstos se retiran. Significando una victoria pírrica para los humanos.
• Cuando Nina salta sobre Charioce para pedirle que la abrace, él baja la guardia, siendo incapaz de tomar su espada cuando piensa que Nina lo enfrentará. Se rinde ante ella, pues es su única debilidad.
• Los Soldados Ónice se enfrentan al Dragón Rojo, pero se rinden cuando no le pueden hacer frente.
• Temor:
• Gabriel tiene miedo del abrumante poder que tiene Charioce y teme por la destrucción del balance del mundo, ya que el poder de Dromos es tan destructivo como el de Bahamut.
• Nina teme por la vida de Jeanne, Kaisar y Rita, y corre en su ayuda.
• Charioce teme por la vida de Nina cuando el gólem atrapa al Dragón Rojo entre sus brazos para asfixiarlo, y no se queda tranquilo hasta confirmar por sí mismo que Nina está bien y respira.
• Amor:
• Los sentimientos de Nina hacia Charioce/Chris no cambian incluso tras enterarse de que es el rey al que tanto desaprobaba, pues es el único capaz de desencadenar su transformación.
• Los sentimientos de Charioce hacia Nina no cambian tras confirmar que es el Dragón Rojo que tantos problemas le dio (*).
  
  (*): Ciertamente, el descubrir por sí mismo que Nina es el Dragón Rojo solo hace que le guste más, pues ya tenía una fijación con él, dado a que él mismo tiene una ascendencia relacionada a los dragones y se ve atraído hacia ellos, como ya se ha mencionado y explicado en los análisis de los episodios anteriores.

• Identidad y secretismo:
• Nina acaba revelándole a Charioce/Chris que ella es el Dragón Rojo tras pedirle que la abrace. Con esto, ahora ambos son completamente iguales ante los ojos del otro, ya que no tienen que esconder sus identidades secretas.

Símbolos: 

• Dromos: Simboliza la muerte. Antes de que revele su forma aperlada —la que simboliza el poder de un dragón, como se explicó en el análisis del episodio 12—, el dispositivo se muestra como una cúpula acorbalada, de la misma forma que las tumbas ancestrales Tholos.
  Al hacer referencia a la entrada de una tumba, se entiende que llevará a la muerte a todos aquellos que se expongan a su ataque.

• Mano izquierda: Al igual que Dromos en sí, la mano izquierda también simboliza la muerte. Charioce usa su mano izquierda para activar Dromos y éste adopta su forma para atacar a los dioses. Este simbolismo da más sentido al que Dromos sea un arma de destrucción masiva.

• Ojo izquierdo: Simboliza sobrenaturalidad. Es el ojo al que se le adjudica un poder que no es humano. Además, al ser su ojo afectado, Charioce pasa a ser el paralelo humano de El. 
• Pérdida de visión: Siempre significa una negación a ver la realidad. Charioce ha perdido la visión de su ojo no solo por haberlo sacrificado para ofrecer energía vital a Dromos, sino porque es una consecuencia de haberse negado a ver que sus acciones estaban despertando la ira de los dioses, tal y como se lo había advertido Kaisar anteriormente.
• Color negro: Sigue simbolizando la muerte. Es más evidente cuando el ojo izquierdo de Charioce se torna grisáceo tras hacer uso de Dromos, perdiendo la vista en el proceso.

• Ala izquierda: Representa la derrota de los dioses. Este símbolo está presente cuando Gabriel ve cómo Charioce y los humanos aniquilan su ejército. El símbolo vuelve a repetirse cuando Gabriel ve a través de su oráculo y solo su ala izquierda es enfocada, la misma que está frente a ella.

• Cenizas: Simbolizan la muerte y el sacrificio. Las cenizas hacen alusión directa a Charioce/Chris quien acaba de sacrificar un ojo y su brazo por la humanidad, quedando partes de él "carbonizadas". 

• Espada: Representa la fuerza de Charioce, quien es indefenso ante Nina.
  Esto es claro cuando Nina salta sobre él e intenta tomar su espada, pero para en seco, ya que ante Nina no tiene poder.

• Abrazo: Simboliza afecto. Y, a diferencia de los abrazos que Nina ha recibido antes por parte de Azazel en los episodios 4 y 7, el que Charioce le da es tierno y delicado, comunicándole que la quiere.
  
  Este abrazo es significativo porque Charioce no solo se lo da porque siente algo por ella, sino porque en ese momento no le importa nada más que abrazarla y demostrarle su amor porque acaba de sobrevivir al uso de Dromos.
  
  El poder estar con ella y tenerla en sus brazos es algo que podría no haber llegado a hacer de haber muerto. 
  
  Y no solo eso. Nina lo salvó de seguir entregándole de su energía vital a Dromos al llegar a la cabina y distraerlo del ataque que estaba realizando.
  
  Por este motivo, el abrazo es una forma de agradecerle, también, el que le haya salvado la vida.

• Reflejo en ojo izquierdo: Nina se refleja en el ojo izquierdo de Charioce, con el cual no puede ver. Charioce se refleja en el ojo izquierdo del Dragón Rojo, quien lo ve, pero que no reconoce, ya que la mente humana de Nina no está conectada del todo a su mente dragón aún.
  
  Esto quiere decir que su lazo es tan fuerte que ambos se reconocen incluso sin verse del todo.

• Toque/Tacto: Al igual que cuando echaron un pulso y bailaron, el toque entre ambos es importante porque es la forma que Nina y Charioce —almas gemelas— tienen de comunicar sus sentimientos hacia el otro. 

Escenarios: 

• Ciudad Real de Anatae
• Isla-Prisión
• Dromos
• Superficie
• Tierra de los dioses
• Cielo Vanaheimr

Referencias: 

• Tumbas Tholos: Las tumbas ancestrales griegas Tholo eran unas tumbas redondas de piedra con una cúpula con ménsulas, característica de los enterramientos reales de la civilización griega micénica. También se conoce como tumba colmena. A una tumba tholos se accedía a través de un pasaje conocido como dromos.
• A Farewell to Arms: Referencia a la película del mismo nombre y cuyo argumento trata de una enfermera inglesa y un soldado americano en el frente italiano durante la Primera Guerra Mundial que se enamoran, pero los horrores que les rodean ponen a prueba su romance.
  
  
  De forma parecida, Charioce y Nina son, respectivamente, un rey y una mujer mitad dragón que se enamoran en Anatae, y los horrores de la guerra ponen a prueba su romance.

Presagiador: 

• Postura dragonesca: Nina salta sobre Charioce y queda mirándolo desde arriba. Esto anuncia que Nina le rebelará que es el Dragón Rojo.
  
  Esta misma pose se repite cuando el Dragón Rojo mira a Charioce desde arriba.
  
  Su postura dragonesca es reiterada en la conversación que tiene con Jeanne en la carroza de Bacchus.

• Espada envainada: Al no ser capaz de sostener su espada cuando Nina salta sobre él cuando ella le pide ayuda, se presagia que su debilidad es Nina y que no se defenderá ante ella incluso si ella le ataca.
• Cenizas: Al estar presentes cuando Chris y Nina se abrazan, podría significar que en algún punto alguno de los dos, o ambos, se sacrifiquen por el bien del otro o de la humanidad. Concepto de gran relevancia en el episodio 24.

Personajes:

• Charioce/Chris: Después de haber sincronizado la piedra de Dromos con su mano izquierda y haber pagado su uso con parte de su energía vital, dispara el cañón y logra derrotar a los dioses. Incluso logra ocasionarle daño directo a Gabriel y a El. El ataque le cuesta perder la visión de su ojo en el proceso y su brazo izquierdo, el que queda herido y ennegrecido.
  
  
  Mientras ataca a los dioses, atrapa a Nina, quien vuela por los aires a causa del poder destructivo de su arma. Cuando Nina recobra la consciencia, se le acerca para asegurarse de que esté bien. Aunque es hostil hacia sus enemigos, es dulce con Nina, a quien escucha reclamarle por haberse disfrazado, paseado por la ciudad, e incluso haber bailado con ella. Charioce piensa que su protesta es tierna y le vuelve a preguntar si bailaría con él una vez más, haciendo que Nina se ruborice de emoción.
  
  
  Cuando Charioce ve que Nina quiere ir en ayuda de Jeanne, quien está siendo atacada por la unidad Ónice, le dice que no hay forma de escape. Aún así, Nina le pide que la ayude. Charioce no entiende cómo quiere que lo haga exactamente, y queda mirándola fijamente. Sus deberes de rey le impiden echar pie atrás en la captura de Jeanne.
  
  
  Al no darle una respuesta, Nina salta sobre él. Charioce, instintivamente, piensa que Nina lo puede atacar, pero es incapaz de acercar su mano a su espada, y solo la queda mirando hacia arriba sin reaccionar.
  
  
  Nina le pide que la abrace, pero al seguir sin reaccionar, Nina se lo vuelve a pedir desesperada. Charioce es incapaz de negarse y la abraza con cariño, desencadenando la transformación de Nina.
  
  
  
  
  Tan pronto confirma que Nina es el Dragón Rojo, se preocupa por ella porque sabe que su ejército la atacará con todo su poder. Charioce mantiene su mirada en el Dragón Rojo todo el tiempo y observa cómo éste ayuda a Jeanne y Kaisar y se deshace de sus soldados.
  
  
  Cuando un gólem que los Soldados Ónice controlan atrapa a Nina entre sus brazos, impidiéndole respirar, Charioce se apresura en bajar de Dromos y llegar al campo de batalla lo antes posible, pues teme que Nina muera.
  
  
  Al ver cómo Nina se defiende y derrota a sus mejores hombres, Charioce queda impresionado no solo por su poder, sino por la hermosura de Nina como dragón y ser en su totalidad.
  
  
  Fascinado, Charioce camina hacia el Dragón Rojo, aliviado de que esté bien.
  Nina le gusta tanto, que se quita el guante de la armadura para tocarla en su forma dragonesca, como si tocase el rostro de la Nina con la que había compartido hasta entonces.
  
  
  En el preciso momento en el que su mano toca sus escamas, Nina vuelve a su forma original, aunque inconsciente, y Charioce se sorprende de volver a ver son sus propios ojos que es verdad que Nina y el Dragón Rojo son la misma entidad: la mujer de la que se ha enamorado.
  
  
  Charioce la sostiene en el aire antes de que caiga post-destransformación, y se asegura de que esté bien cuando confirma que respira normalmente en sus brazos (*).
  
  
  (*): Charioce había quedado preocupado por su bienestar cuando el gólem le impidió respirar debidamente en su forma dragón, pues había quedado casi completamente privada de todo aliento.
  
  
  Charioce no puede estar mucho tiempo más con Nina, pues Rita lo ataca y lo separa de ella.
  
  
  Charioce le pregunta quién es, pero Rita solo le dice que es una zombi más del montón.
  
  
  Charioce sigue mostrando su preocupación por Nina cuando más soldados llegan donde está él para protegerlo. Y como no quiere que se lleven a Nina, decide seguirle el juego a Kaisar, quien distrae a los soldados para que Rita, Jeanne y Nina puedan escapar. 
  
  
  Al estar seguro de que Nina está libre de peligro, Charioce anuncia su retirada, ya que no hay más dioses a la redonda.
  
  
• Nina: Sus sentimientos hacia Charioce/Chris no cambian, pero le exige explicaciones por haber ocultado su identidad, paseado por la ciudad, y bailado con ella. Se emociona mucho cuando Charioce le pregunta si volvería a bailar con él.
  
  
  Tan pronto como Nina ve que los Soldados Ónice están atacando a Jeanne, Rita y Kaisar, le pide ayuda a Charioce al tiempo que le muestra abiertamente su faceta dragonesca al saltar sobre él y adoptar una postura que solo un dragón adoptaría.
  
  
  En ese momento, Nina se ha decidido a revelarle su identidad, no solo porque quiere ayudar a sus amigos, sino porque quiere que Charioce también sepa quién es realmente. Cuando Charioce la abraza, lo hace con ternura y delicadeza, cosa que Nina no había experimentado antes y, luego, se convierte en el Dragón Rojo.
  
  
  Nina acaba con la unidad Ónice, salvando la vida de sus amigos. Reconoce a Jeanne y también a Charioce mientras está transformada, aunque su mente humana no es consciente de esto. Nina vuelve a su forma humana cuando Charioce la toca, para luego caer en sus brazos.
  
  
  Rita y Jeanne se la llevan lejos de Charioce en Hipogriff, y despierta cuando ya se han alejado del lugar.
  
  
  Sus amigas le dan las gracias por haberles salvado la vida, pero Nina no recuerda detalles y sigue preocupada por Kaisar y Favaro. Y también por Charioce, aunque no dice nada sobre él.
  
  
  Rita pronto la deja con Jeanne, ya que irá a salvar a Kaisar y a buscar a Favaro. 
  
  
  Una vez Rita se va, Jeanne expresa que le gustaría ir a la tierra de los dioses, pero que no sabe cómo podría llegar hasta ahí.
  
  
  Nina le dice que la anciana de su pueblo puede ayudarla, así que terminan dirigiéndose hasta el Pueblo del Dragón como su próxima parada.
  
  
• Gabriel: Reconoce su desventaja ante los humanos al ver a Dromos, pero, aunque intenta hacer que sus tropas se retiren, éstas se niegan, al igual que El, quien no dejará de atacar hasta recuperar a su madre.
  
  
  Cuando Dromos destruye la barrera de El y acaba con su ejército e incluso con parte del cielo Vanaheimr, se lamenta por haberse confiado y provocado a Charioce, y se pregunta qué pretende hacer él tras haber creado un arma prohibida cuyo poder se iguala al de Bahamut.
  
  
• El: Desobedece la orden de retirada que da Gabriel porque aún no ha recuperado a Jeanne, la que era la condición para ir a la batalla. Está muy seguro de que ganará su enfrentamiento contra Charioce, pero es superado por el poder de Dromos, quedando inconsciente y siendo rescatado por Sofiel.
  
  
• Sofiel: Se entera de la existencia de Dromos y que los humanos han sido capaces de crearla gracias a las tablas con conocimiento prohibido que tomaron de los templos sagrados. Se sorpende al saber que el cañón tiene el poder de destruir el equilibrio del mundo.
  Sofiel salva a El de los escombros tras haber recibido el ataque de Dromos.
  
  
• Favaro: Sale volando por los aires cuando intenta sujetar a Nina. Se desconoce su paradero. Rita va en su búsqueda.
  
  
• Rita: Lucha contra Soldados Ónice hasta que es salvada por Nina una vez transformada en el Dragón Rojo. Luego, Rita recupera a Nina de las manos de Charioce y se la lleva lejos de la capital real en Hipogriff. 
  
  
  No sigue a Nina y a Jeanne en su viaje al pueblo dragón, pero les advierte que no se aparezcan por Anatae, pero que ella regresará para ayudar a Kaisar y Favaro.
  
  
• Kaisar: Ayuda a Rita, Jeanne y Nina a escapar, distrayendo a los Soldados Ónice. Sin saberlo, Charioce sigue su juego para que actúe de carnada y así Nina, Jeanne y Rita puedan escapar y estar a salvo.